La dermatitis atópica es una patología inflamatoria crónica de origen inmunológico que cursa con sequedad cutánea, prurito intenso, eritema y descamación.
Puede aparecer debido a estímulos ambientales, como el cloro de piscinas, jabones agresivos o altas temperaturas, y o factores endógenos como el estrés o el componente genético.
El cuidado debe basarse el la reducción de la sequedad y control del picor. Para ello utilizaremos una higiene con aceites o jabones syndet y aplicaremos fórmulas nutritivas y emolientes a ser posible nada más acabar el baño o ducha ( que deben ser cortos y no muy frecuentes) para retener el agua en la piel.
También es importante en estas pieles una fotoprotección alta y con texturas ricas e hidratantes así como con fórmulas protectoras con función barrera ante agentes externos como el agua de mar, piscina, sudor y arena.
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